“Me molesta cuando se dice que sólo los políticos son corruptos; la gente también lo es. Hay personas que reciben las casas y las quieren vender. No está bien. Aquí vienen, reciben la vivienda y dicen ‘qué divino, gracias’. Después nos enteramos que las ponen en venta”, dijo sin vueltas Gustavo Durán, interventor del Instituto Provincial de Vivienda y Desarrollo Urbano (Ipvdu). Esto es lo que sucede con algunas de las más de 400 casas entregadas en el emprendimiento de 2.500 viviendas ubicado en Manantial Sur. Según Durán, algo similar sucedió en Lomas de Tafí, pero ya se tranquilizó. “Las notificaciones son constantes”, dijo. De los relevamientos de los supervisores se desprende que “al menos hay un 30% de casas adjudicadas que no están habitadas”, precisó. El porcentaje oficial será confirmado cuando finalicen un informe con los datos obtenidos, pero la experiencia de Durán le permite afirmarlo. “En muchos casos es difícil confirmar que no hay gente viviendo porque algunos van y vienen, o dejan conectada una heladera, llevan una mesa o tienen cerradas las casas con cortinas”, reconoció.
Para los vecinos que viven allí desde octubre, la situación es muy clara: “La mayoría de las casas deshabitadas son las de la Policía”, señalaron Gabriela Sánchez y Margarita Morales, vecinas del sector A. Hacen referencia a las 100 viviendas que fueron entregadas a miembros de la fuerza policial el año pasado. Quienes viven allí recibieron un acta de posesión y no está permitido venderlas antes de los tres años. “Las escrituras serán entregadas cuando finalicen los juicios de expropiación y todo quede a nombre del Ipvdu”, explicó Durán.
Pero el problema de quién vive y quién no, para los vecinos no es central. Lo que les preocupa es la falta de servicios de recolección de residuos, desmalezamiento e iluminación de las calles. No es nuevo, explican, porque lo vienen padeciendo desde que llegaron al barrio. “No pasa ni siquiera cada 15 días el camión”, explicó Élida Lobo, otra vecina del sector A.
Pese a que la modificación de la ley N° 5.530, de límites y categorización de municipios, establece que toda esa urbanización forma parte de capital, los vecinos aseguraron que cuando reclaman les responden que deben concurrir a El Manantial, Lules.
Esto ha llevado a que la basura se desparrame por las avenidas que bordean la parte habitada de esta urbanización. Que forme montículos en los terrenos baldíos. Que se meta por los agujeros de las cámaras de inspección porque las tapas se las han robado. “Hace unos días limpiamos, pusimos una chapa y arriba piedras. Pero al otro día la chapa ya no estaba”, comentó indignado Francisco Décima, verdulero del barrio que vive en el sector A sobre una de las avenidas que atraviesa el emprendimiento.
De esa misma cámara brotan las aguas servidas constantemente y dibujan un camino de agua verdosa y con olor que serpentea entre los residuos hasta perderse, varios metros más abajo, dentro de otro pozo. Por ahora las dos estaciones de bombeo construidas para ese emprendimiento no están funcionando.
No es raro ver los camiones atmosféricos yendo y viniendo por las calles. “Ya los vas a ver pasar”, había advertido Décima. En el transcurso de una mañana, al menos tres de esos camiones descargaron sus tanques en los piletones ubicados cerca del megabarrio. Prefirieron no identificarse; sólo dijeron que trabajaban para la Sociedad Aguas del Tucumán (SAT) y que su tarea era destrancar las cloacas.
Desde el Ipvdu desconocían el problema que había con el sistema de cloacas, pero reconocieron que podría tratarse de algo ocasionado en los barrios ubicados más arriba. Esos también son del Ipvdu y es donde se relocalizó en 2014 a los vecinos de villas y asentamientos. Durán se comprometió a hacer los reclamos pertinentes ante la SAT.
Carlos Arnedo, director de Espacios Verdes de la Municipalidad, reconoció que es tarea de la capital recolectar la basura y aseguró que se lo viene haciendo todas las semanas. Además, explicó que hasta tanto los espacios verdes sean parquizados, el mantenimiento es responsabilidad de las empresas constructoras. Sobre la iluminación de las calles del emprendimiento, explicó, constantemente deben reponer los focos porque el vandalismo es alto en la zona.
Durán aseguró que lleva un tiempo que las cosas funcionen en una urbanización tan grande Comparó la situación con Lomas de Tafí, que cuando se inauguró las quejas por los basurales y las falencias en los servicios eran constantes hasta que mejoraron.